En las clase de Dantzaterapia hemos formado un pequeño grupo de alumnos y a través de la música y de los movimientos de nuestro cuerpo, hemos dejado fluir las emociones y las sensaciones. Así hemos trabajado el aspecto emocional, sensorial y el físico.
La Dantzaterapia a pesar de ser dirigida, tiene como principal objetivo expresar y trasladar lo que cada niño y niña lleva en su interior, gracias a la herramienta de la danza.
Creo a nivel personal, en dejarse llevar para obtener unos resultados excelentes. Por tanto, hemos trabajado en la clase la improvisación, dejando más de lado las técnicas corporales más estrictas. La danza la concebimos como algo muy positivo y perfecto para expresarse y divertirse.
Hemos comenzado la clase con calentamientos, estiramientos y ejercicios guiados de movilidad. La danza que queremos trasmitir no se asemeja a una clase de gimnasia, es más terapéutica pero con un sentido claro dirigido a educar nuestro cuerpo y nuestros movimientos. Con ello trabajaremos la musculatura, la coordinación, el ritmo, la capacidad pulmonar e incluso la memoria. Y fomentaremos el respeto y el compañerismo entre los peques.
Para finalizar, utilizaremos diferentes técnicas de relajación y ejercicios de Mindfulness para volver a la calma.Aprendiendo a respirar correctamente para alcanzar un estado de serenidad pleno.
¡Mil gracias, Cristina, por el tiempo pasado con nosotros y todo lo que hemos aprendido!
